lunes, 1 de noviembre de 2021

CUATRO MIL CUATROCIENTOS TREINTA Y UNO

 





He tenido un día maravillosos, parece ser que ya he salido del malestar causado por la operación, me he arreglado y por fin he salido de casa, he ido a Barrika y a pesar de que todo ha cambiado, sigo encontrando allí ese algo silvestre y salvaje con lo que algo muy dentro de mí se identifica y hace que me sienta en mi elemento.

He sacado muchas fotos, algunas muy bonitas, tenía ganas de sentirme así, no obstante por la tarde he querido poner el lavavajillas que estaba desordenado y he recordado al asco que supone el alcohol, he tenido muy malas experiencias con el alcohol, tanto propias como ajenas o cercanas y realmente lo detesto, es algo que desearía no haber conocido.

Vengo de una familia muy seria en la que nadie bebía o si lo hacía nunca se excedía, nunca había visto un borracho hasta que salí de la casa de mis padres.

Estoy viendo una serie que me está afectando bastante porque está relacionada con el alcohol y las consecuencias que desata, a veces los recuerdos de todo lo que he vivido pueden ser preciosos y todo lo contrario.







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