lunes, 30 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y OCHO








Acabo de ver Hanna con una impresionante Charlotte Rampling en todo el esplendor de su magnífica madurez.
Es una mujer tan valiente que solo su presencia inspira respeto, belleza e inspiración.
También me gusta la construcción del film que permite que el espectador adivine lo que no se expresa.
Sutil, delicada, ligera, no apta para todos los públicos.
Me ha entusiasmado.
Me apetece recomendarla a las personas capaces de apreciar el minimalismo radical.










domingo, 22 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y SIETE








Acabo de ver "Los dos papas" y escribo en caliente para que no se me olvide lo que he sentido en algunos momentos.
Aunque no soy rencorosa hay ciertos asuntos que no me conviene olvidar.
La película es muy buena y me ha mantenido atrapada, eso es innegable.
No obstante debo aclarar que he sido educada, a mi pesar, en la iglesia católica tanto dentro de mi propia familia como en los colegios de monjas en los que hice mis estudios durante trece largos años.
No tuve acceso a otra información que no fuera la que impartía la iglesia de Roma.
Viví bajo el temor a cometer pecados mortales y el miedo al infierno.
El misal y la Biblia eran mis libros de cabecera.
No puedo ni debo echar la culpa a nadie pero tengo la sensación de que me robaron la adolescencia y parte de la madurez.
Cuando por fin fui consciente de la privación de libertad mental en la que estaba atrapada, exploté como un corcho de una botella de champán y me desquité como pude, desde la ignorancia supina en la que me encontraba.
Ese fue el comienzo de un rosario de disparates de los que prefiero no hablar, no solo por demasiado trillados sino porque ya no tienen remedio.
Mucho he cambiado desde que aprendí que el mundo es grande y que todos estamos hechos de los mismo: puro amor.







miércoles, 18 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y SEIS








Me encanta que me recomienden películas y series.
De momento tengo algunas que me interesan.
El día 20, es decir el próximo viernes, está anunciada en Netflix "Los dos papas" documental basado en la realidad.
Me van mejor las que puedo ver en casa porque no me convienen las aglomeraciones ni los cambios de temperatura, tengo que cuidarme, por lo que de momento no creo que pueda ver "Pavarotti" documental biográfico dirigido por Ron Howard, que según lo anunciado solo estará unos días en los cines, desconozco el motivo.
Me apetece mucho pero me temo que tendré que esperar.
Conocí a Luciano hace muchos años en San Francisco, California y me pareció encantador.
Hablé de aquella cena hace tiempo cuando empecé a asistir al taller de Escritura.
También me apetece "La gran mentira" pero no creo que la pueda ver online.
No importa, esperaré.








martes, 17 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y CINCO








Reconozco, no sin cierto orgullo, que estoy haciendo un buen trabajo en el reto que me propuse de deshacerme de todo o casi todo lo que no necesito y poder vivir en una casa vacía, por lo menos el espacio que yo utilizo.
He tirado a la basura, reciclando, muchas cosas que jamás imaginé que pudiera deshacerme de ellas.
Me refiero a fotos, collages y asuntos de cuando era pintora.
Me quedo más ancha que larga.
Me hace feliz deshacerme de los apegos.
Tengo una caja con películas de super 8 que mandé pasar a otro sistema que he olvidado y que ya no funciona y estoy deseando perderla de vista.
A mí lo que me gusta es que todo esté limpio y ordenado.
Y al decir todo me refiero a lo imprescindible.

¿Para qué habré guardado tantas cosas que no sirven para nada?












lunes, 16 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y CUATRO








Hace unos días empecé a ver la serie americana Big Little Lies que además de tener muy buenas críticas, me la habían recomendado algunas amigas.
Me costó un poco meterme porque las protagonistas son madres jóvenes casadas y con niños pequeños lo cual se aleja bastante de mi circunstancia actua, pero insistí y ahora la sigo con gran interés.
Acontece en Monterrey, California, en un lugar que tiene cierta similitud con Malibu en donde viví tres años extraordinarios de mi vida.
Lo que a mí me llevó allí no tiene nada que ver con la vida que hacen las chicas de la serie, no obstante recuerdo lo feliz que fui y me gusta ver esos paisajes, escuchar ese acento que tanto me complace y recordar la gente que conocí en la Pepperdine University.












domingo, 15 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y TRES








Ha sido una sorpresa ver el sol en el cielo azul y un calor de verano.
Podría alegrarme la vida pero dedico más tiempo al tema, reflexiono y me doy cuenta de que todo es mentira.
Se trata del cambio climático, de lo que nos está llevando a todos al desastre antes o después.
Ese tema me preocupa bastante, sobre todo porque me doy cuenta de que asuntos importantes que conciernen a mi vida están en manos de ineptos.
No me gustan las personas que no reconocen a los que saben más que ellos, en este caso en concreto, a los científicos expertos.
He seguido la COP25 y me ha defraudado.
Aún así no desespero, confío en Greta Thunberg y en todas las personas conscientes de la importancia de reducir el CO2, lo deseo con todas mis fuerzas.
Me pregunto por qué no hablan de la importancia de los árboles.

Ayer escuché una entrevista que le hicieron a J.J. Benítez.
Hacía mucho tiempo que no sabía nada de él, pensaba que todavía se dedicaba a los ovnis pero me equivoqué, parece que ha cambiado mucho.
Escribe libros sobre sus actuales creencias religiosas y predice que en el año 2027 caerá un meteorito que destruirá la tierra.
Asegura que hay vida fuera de nuestro planeta y que son inteligentísimos.
También hicieron una entrevista a la escritora de Llodio Espido Freire que me gustó.
Siempre me ha interesado su trabajo e impresionado que le dieran el Planeta cuando solo tenía veinticinco años, creo que es un prodigio.







sábado, 14 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y DOS









Veo videos de minimalistas japoneses y aunque en el fondo tanto ellos como yo perseguimos lo mismo, noto una gran diferencia y es que yo, sin ser extrema, siempre he tenido tendencia a minimizar, a abreviar, a reducir.
Empecé a darme cuenta de que deseaba expresarme con menos cuando empecé a estudiar Bellas Artes y a pesar de tener que pintar los modelos que exigían los profesores, intentaba expresarme de manera escueta.
Poco a poco, a lo largo de la vida he intentado deshacerme de lo innecesario aunque comparada con los actuales japoneses nadie lo diría.
Tampoco mi meta es llegar a ese punto, no soy tal radical.
De momento me conformo con irme deshaciendo poco a poco de las cosas que no utilizo desde hace por lo menos un año y que no me hacen feliz.
Al mismo tiempo me gustaría que mi entorno vaya adquiriendo la sensación de vacío y pulcritud que solo a través de un orden impecable se puede alcanzar.
La diferencia entre los minimalistas japoneses y mi deseo, es que para ellos empezó con una decisión mientras que yo, en el fondo de mi ser siempre lo he deseado.
Muchas, muchas, muchas veces me he puesto a trabajar en el intento y cuando había avanzado y notaba la sensación de bienestar que produce el Feng shui, lo dejaba sin darme cuenta y empezaba una vez más a acumular objetos innecesarios.
Esta vez me noto más decidida que nunca, creo que lo conseguiré.
Por un lado me resulta mucho más difícil por lo cansada que me encuentro y la poca fuerza que poseo y además porque mis hijos, con quienes comparto la casa, no están en esa línea sino más bien la contraria.
Un reto importante.












viernes, 13 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y UNO








Una de las cosas más difíciles y satisfactorias, es deshacerme de todo lo que no me sirve.
Me cuesta muchísimo tirar las cosas que no utilizo desde hace tiempo, me lo pienso durante semanas, meses, años y cuando por fin, casi temblando por el temor a equivocarme, tomo la decisión, siento un gran alivio.
Después, al ver el espacio vacío dejado por lo que ya no necesito, me noto ligera, alegre, con ganas de seguir en el proceso.
Ahora que llevo una temporada deshaciéndome de algo cada día, o por lo menos cambiándolo de sitio para seguir dando vueltas a la idea ¿lo tiro o lo guardo porque tal vez algún día lo necesite? todo se va revolucionando.
Todavía no tengo la sensación de orden sino más bien lo contrario, no obstante me consta que estoy avanzando.
Incluso me he metido en la terraza de servicio, de donde he tirado cubiertos de alpaca que me regalaron cuando me casé, una cafetera exprés del año de la polka y más cosas que ya no recuerdo.
No tengo grandes esperanzas de que la casa quede a mi gusto, eso es imposible porque a mis hijos les gusta acumular y no me queda más remedio que respetarles, sin embargo los espacios en los que yo me muevo acabarán un poco mejor.
Mi fuente de inspiración es por encima de todo Japón, en donde se cultiva el minimalismo extremo, cuyo gurú es Fumio Sasaki de cuyo apartamento en Tokio, sus amigos dicen que parece una sala de interrogatorios.
Budismo Zen: menos es más.






jueves, 12 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS NOVENTA








Ayer no fui capaz de escribir el diario y eso que me siento contenta y satisfecha, pero mi cuerpo protesta.
Estoy aprendiendo mucho con esta enfermedad, no me queda más remedio que estar agradecida.
Creo que hoy me encuentro mejor y aunque solo sea para decir que estoy viva, he decidido sentarme  ante el ordenador.
He empezado a ver una serie que me han recomendado algunas amigas, se llama "Big Little lies".
La acción se centra en California, en la costa y dado que pasé allí tres maravillosos años de mi vida, espero concentrarme aunque del primer capítulo no sabría qué decir.
También he investigado la serie de la que han hablado Pablo Iglesias y el rey "La voz más alta" cuyas críticas me han defraudado.
A veces me cuesta meterme en una serie pero luego me viene bien saber que voy a estar entretenida un rato mientras que con una película, empieza y termina el mismo día.











martes, 10 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS OCHENTA Y NUEVE







Que todo sucede muy deprisa es un hecho exponencial.
En los últimos días he comprobado que casi todo lo que me rodea está preparado para asustarme.
La serie Years and years de la que ya he hablado se pude interpretar como ciencia ficción pero es mucho más que eso, está directamente interrelacionada con lo que acontece en el planeta tierra.
Están pasando unos documentales en la 2 de TVE que se llaman Humano3.0 que tratan de los trabajos que se realizan en Silicon Valley sobre la inteligencia artificial, que ya está sustituyendo a los seres humanos en varios campos de la salud, no solo en prótesis corporales sino en ayuda psiquiátrica para sustituir a los neurólogos profesionales.
En la radio comentaban que todo lo que acontece que tanto nos preocupa a las personas de cierta edad que no hemos nacido digitalizadas, no causa ningún efecto nocivo en los jóvenes sin contar, claro está, el cambio climático del que tanto se habla gracias a Greta Thunberg de quien ha dicho Harrison Ford que ha estado con ella en la COP25, que es the most important leader in the world right now (sic).
Leonardo di Caprio, tras su reunión con Greta se manifestó como un activista en vez de un actor.
Estoy encantada de no tener prejuicios respecto a la edad de las personas porque me he relacionado con auténtico interés con personas muy jóvenes y con muy mayores y con ambas he aprendido y disfrutado.













lunes, 9 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS OCHENTA Y OCHO







He estado un par de días sin querer ver la serie Years and years porque me afecta demasiado.
Es tan buena y tan realista que luego me viene a la cabeza y me estremezco.
Tan explícita que resulta excesiva, no obstante mi intuición reconoce muchas de las acciones y conversaciones que aparecen en esa magnífica lección que debería ser pasada en los colegios, escuelas, universidades y sería conveniente que la vieran los políticos también, aunque no sé si se enterarían de algo porque como decía la doctora Verdugo tienen el lóbulo frontal atrofiado (sic).
Mientras tanto estudio las series y películas que pueden interesarme para estar entretenida durante estos días, en que solo me apetece descansar y estar en casa calentita.

Mattin ya está fuera, parece ser que tiene una hernia discal y hoy volará a Berlín en donde se encontrará a gusto con Lisa y Odita y podrá hablar con un médico en un idioma que conoce.
A primera vista el portugués puede parecer fácil pero a la hora de la verdad hay que tener el oído acostumbrado para entenderlo.
Lo sé por experiencia propia, lo mismo que con el italiano, que por mucho que a primera vista se parece al castellano, cuando he tenido cenas con italianos mi torpeza me mantenía en absoluta ignorancia.












domingo, 8 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS OCHENTA Y SIETE








Ha sucedido un acontecimientos tan inesperado que me parece que ha pasado mucho tiempo y que he entrado en otra etapa de mi vida.
Estaba tranquila y contenta pensando que tenía por delante treinta días para descansar y permitir que mi cuerpo saturado de arsénico, se desintoxicara un poco.
Pasé una tarde estupenda viendo una película muy muy buena, Historia de un matrimonio, dirigida por el gran Noah Baumbach y protagonizada por Scarlet Johanson y Adam Driver, ambos en estado de gracia.
Adam Driver me había entusiasmado en Paterson de Jim Jarmusch.
Me disponía a prepararme la cena, cuando recibí una llamada de Mattin que se encontraba en un hospital de Lisboa a donde había ido días antes para dar un concierto.
Ya me había contado que padecía un fuerte dolor de espalda, que aguantó estoicamente hasta que ayer, yendo en un taxi se quedó inmóvil.
Una ambulancia le fue a buscar y en el hospital le dieron analgésicos y le hicieron un escáner.
Imaginé que habría sido un ataque de ciática pero hasta hoy no sabremos lo que dicen los médicos.
De momento está tranquilo, sin dolor y hoy le verá el doctor y le dirá el resultado del escáner.














sábado, 7 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS OCHENTA Y SEIS








Suelo ver televisión mientras desayuno y hoy he tenido la suerte de encontrarme con un programa encantador sobre Alaska, a quien tuve el placer de conocer en Bilbao Arte, centro en el que organizan eventos interesantes de vez en cuando.
Durante bastante tiempo han ido mostrando a la Olvido Gara que llegó a Madrid con diez años y su trayectoria hasta hoy en día.
Me ha gustado ella y también he disfrutado viendo a personas a las que conocí en aquellos años de la movida ya que yo iba a Madrid de vez en cuando y viajaba por el mundo con Bocaccio Barcelona.
Desde mi actual situación me parece mentira lo saludable que me encontraba en aquel momento.
Menos mal que tengo un mes por delante para recuperarme de todo el arsénico que tengo en el cuerpo porque lo noto demasiado.
Solo necesito descansar y tener paciencia.







viernes, 6 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS OCHENTA Y CINCO







Greta dice que hay mucho ruido pero todavía no se han tomado las medidas políticas concretas  para frenar las emisiones de dióxido de carbono que siguen creciendo.
Veo a Greta entre la multitud, casi sin protección, me preocupa su seguridad y me conmueve verla tan segura en su determinación.
Estoy emocionada, casi llorando.
Pienso en Juana de Arco, joven campesina francesa y santa por la iglesia católica, cuya biografía todos conocemos.
No intento igualar a Juana con Greta, solo que ambas son chicas muy jóvenes, a mi entender heroínas.
En esta manifestación que hemos tenido la suerte de que se realice en Madrid estamos despertando conciencias.
Nunca ha habido un consenso científico tan potente como el actual.
También valoro a los padres de Greta cuyo proyecto apoyan.
Hoy es un día muy importante para todos los que habitamos este planeta y para nuestros descendientes.









jueves, 5 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS OCHENTA Y CUATRO







Me pregunto por qué me afecta tanto hablar de hematología y las enfermedades que pertenecen a ese terreno.
En el salón de quimioterapia del hospital, suelo entablar conversación con las personas que están cerca de mí y me cuentan sus experiencias, que escucho con interés, tal vez demasiado porque luego, cuando me quedo sola, aunque por un lado estoy encantada de saber que tengo suerte, me entran los miedos a las recaídas o cosas por el estilo.
No creo en las bondades de la ignorancia de ningún tipo, no quiero estar en la inopia, prefiero saber a pesar de que me cueste asimilar lo que voy aprendiendo.
Cuando me ingresaron en el hospital y me diagnosticaron leucemia me pequé un susto morrocotudo sin saber en qué consistía, excepto que el tenor Josep Carreras la tuvo hace tiempo y había organizado una fundación a la que me he asociado.
Entre otros asuntos no menos interesantes, me he enterado de que en el hospital de Cruces, el mío, ya están funcionando dos máquinas de radio de las que donó Amancio Ortega, que son una maravilla.
Tienen la ventaja respecto a las anteriores de que solo radian el área necesaria.






miércoles, 4 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS OCHENTA Y TRES









Estoy fascinada con la serie "Years and years" y parece que no soy la única, porque además de haber ganado el premio a la mejor serie del año 2019 y de tener millones de críticas excelentes, una periodista de The Guardian dice que no nos la merecemos.
Lo único que puedo decir es que me tiene tan cautiva que a veces pienso que está realizada a mi medida, como si fuera un traje de chaqueta confeccionado por mi sastre habitual.
Supongo que habrá mucha gente que la esté siguiendo y tanto si están de acuerdo conmigo en que es magnífica como si no, reconocerán que es especial y sobre todo muy moderna.
Consta de seis episodios y está en H.B.O.

Me propuse y lo estoy llevando a cabo, hacer un poco de Mari Kondo cada día y hoy he añadido algo más que es tirar a la basura en el departamento indicado para reciclar, una cosa por lo menos.
También estoy haciendo orden en mi biblioteca retirando los libros que no me interesan para llevarlos a la casa de cultura de Romo, ya que ofrecen un horario amplio de recogida y aceptan todo menos enciclopedias, libros de texto y revistas.











martes, 3 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS OCHENTA Y DOS








En principio no soy una persona que se emocione con facilidad, sin embargo hay algo en Greta Thunberg que me llega al fondo del alma.
Se me humedecen los ojos cuando veo fotos de ella, tanto sola, sentada en el suelo frente al parlamento sueco al lado de un cartel con la frase: HUELGA ESCOLAR POR EL CLIMA, como al contemplarla hoy, tan tranquila en el puerto de Lisboa, saliendo del catamarán en el que ha atravesado el Atlántico, para poder asistir a la COP25 que se está celebrando en Madrid.
Me gusta su inteligencia, su constancia y su entusiasmo, todo en ella me inspira y suscita admiración.
Cuando me enteré de que es Asperger comprendí que es alguien muy especial.
Tengo un sobrino nieto que también es Asperger y desde pequeño me llamaba la atención su modo de comportarse.
Era tan delicado y único que yo le llamaba "el príncipe".
Cuando me enteré de que es Asperger comprendí muchas cosas.
Su madre escribió, con el consentimiento de su hijo, una valiente biografía de su hijo que leí con auténtico interés.
Poco a poco, a medida que me voy enterando de personas Asperger me doy cuenta de que son realmente importantes, como por ejemplo Bill Gates, Andy Warhol, Albert Einstein y muchos más que lo reconocen encantados, porque las personas Asperger son felices siempre que les dejen en paz.










lunes, 2 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS OCHENTA Y UNO








Jamás pensé que en algún momento de mi vida me sentiría identificada con Gregorio Samsa, protagonista de uno de los libros que más me ha impresionado en mi vida, La metamorfosis de Kafka, cuyo título original Die Verwandlung significa La transformación.
No quiero acordarme demasiado porque me duele, pero reconozco que cuando pienso en las cinco semanas que pasé aislada en el hospital de Cruces con mi cuerpo llena de manchas, tratando de asimilar lo que me estaba pasando, algo en mí me lleva a esa terrible historia que me llenó de espanto.
No sé por qué me viene eso a la cabeza, justo ahora que he superado lo peor del tratamiento y que lo llevo con cierta alegría, consciente de que cada día que pasa estoy más cerca de la curación definitiva.
Además me voy acercando a la persona en la que me reconozco y eso hace que me sienta bien.



PD: Lo que he escrito hoy en mi diario puede resultar negativo pero lo he sacado de mi cabeza y me he quedado tranquila. 
A veces es necesario soltar lo que anda rondando por ahí.







domingo, 1 de diciembre de 2019

DOS MIL NOVECIENTOS OCHENTA








Ayer vi un documental que me mantuvo pegada a la pantalla con verdadero interés.
Se llama Bikram, trata de la biografía de un indio que tiene un método de yoga a 40º Celsius de temperatura, que causa furor en Los Ángeles.
Me resultó interesante y entretenido por varias razones.
He practicado diferentes tipos de yoga tanto en Europa como en India y lo echo de menos.
Aunque desconozco el Bikram y no estoy en condiciones de probarlo, me entraron ganas de volver al yoga ayudándome de un librito que tengo en mi mesilla que lo usé hace tiempo, la última vez que me rompí la pierna.
Resulta muy fácil y práctico porque lo puedo hacer en la cama, tumbada y aunque solo sea un ratito cada día, me sienta muy bien y me alegra la vida.
Es cuestión de dar el primer paso del que hablé hace poco y que me está reportando grandes beneficios.
El primer día solo fui capaz de hacer Mari Kondo durante cinco minutos y me agoté pero me produjo tanta satisfacción que me voy animando y cada día hago un poco más y se empieza a notar el vacío en mi entorno, que es una de mis aspiraciones actuales.