jueves, 11 de noviembre de 2021

CUATRO MIL CUATROCIENTOS CUARENTA

 





Me he divertido mucho viendo la entrevista que le hace Mercedes Milá a Ramoncín.

Hacía tiempo que no veía al rey del pollo frito y creo que le echaba de menos, ni siquiera sé a qué se dedica hoy en día aunque a veces le he visto en alguna tertulia en la televisión y siempre me ha interesado lo que comenta. 

No importan, encontraré lo que me apetezca en Youtube, ahí se encuentra todo.

Recuerdo que cuando salió a la palestra él era mucho más joven que yo y me gustó, me pareció modernísimo, culto y valiente.

Un amigo toxicómano, Cholo, me comentó que se había pinchado con el hermano de Ramoncín y dijo que era mundial.

Las cosas que le cuenta a Mercedes son muy interesantes y los amigos de los que habla también, por cierto no sabía yo que hubiera escrito libros, e incluso un diccionario, ahora tengo que empezar un trabajo de investigación, qué bien, me encanta indagar en la biografía de artistas rompedores que además ponen los puntos sobre las íes.

Me ha puesto de muy buen humor empezar la mañana viendo este programa, he cambiado mis rutinas, es bueno hacerlo de vez en cuando para no apegarme.

Ayer leí el principio del libro de Miguel Bosé y tengo que reconocer que me apetecía mucho pero no me gusta cómo escribe, pensándolo bien creo que nunca le he entendido cuando habla. 

La primera vez que fui a Bocaccio en Madrid les vi bailando en la pista a Miguel y a su hermana, tendrían dieciséis o diecisiete años, estaba vestidos de blanco, me deslumbraron con su belleza, parecían ángeles.








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