viernes, 15 de octubre de 2021

CUATRO MIL CUATROCIENTOS DIEZ Y SIETE

 





Ayer pasé un día excepcional hasta tal punto que casi todas las sensaciones eran nuevas para mí, por lo menos eso fue lo que pensé cuando me retiré a mis aposentos.

Fui a Cruces por la mañana para hacerme un segundo tac y completar así el examen que fue diferente del que me hicieron el lunes, me colocaron al revés y no fue tan desagradable como el anterior. 

Volví a casa, comí, descansé un rato y volvía al hospital acompañada de mi hijo, así me lo habían aconsejado porque podía impresionarme lo que me iban a contar.

Todo aconteció en un lugar en el que nunca había estado, no nos hicieron esperar, en seguida me llamaron, me trataron muy bien y una doctora muy amable que conocía mi historial como si lo hubiera estudiado a fondo, me dijo que todas las pruebas habían dado unos resultados muy positivos y que en la próxima visita decidirían se me pondrían anestesia general o local, no dependía de ella. 

Me tranquilicé cuando me di cuenta de que era imposible que me anestesiaran para algo tan fácil como es extirpar la parte de tumor que me quedaba, ya que en la biopsia me quitaron un buen trozo solo con la anestesia local y no me dolió nada.

Volvía a casa, trabajé un poco y me relajé viendo "Las cinéphilas" documental argentino que me gustó, me entretuvo e hizo que me sintiera identificada con las protagonistas y así pasé un día muy diferente, los otros suelen ser mucho más tranquilos, había cumplido con mi deber y me sentí satisfecha y muy contenta sabiendo que ya solo me quedaban dos días de hospital, por lo menos de momento y agradecida por saber lo bien que me encuentran, si no fuera por la rodilla, estaría en plena forma aunque todavía me quedan revisiones de la leucemia.

Tengo la sensación de que todo lo que he escrito hoy es aburrido y sin interés, lo cual no es óbice para que forme parte de mi vida diaria actual.

Me ha hecho gracia un mail que he recibido de Pilar Serrano que es quien me recomendó "Las cinéphilas" en el que me dice que las protagonistas le habían parecido muy deterioradas, lo cual me ha sorprendido porque a pesar de que son un poco mayores que yo, no las encontré mal, andan bien, tienen alegría de vivir y son cultas.

¿qué puedes esperar de unas mujeres de más de ochenta años que están jubiladas, viudas y les encanta el cine?





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