Me ha parecido gracioso que Vargas Llosa comentara que detesta los alimentos con pepitas, lo cual significa que no soporta cantidad de frutas y verduras que tanto en España como en Perú, allí más todavía, tienen pepitas, y lo más gracioso de todo es que ha contado que cuando conoció a Isabel Preysler, ella estaba tomando aceitunas y él no pudo acompañarle y tampoco se atrevió a decirle el motivo.
Lo que me sorprende es, que por más que lo intento, no alcanzo a ver las pepitas en ninguna clase de aceitunas, ni en las verdes ni en las negras.
Hablando de este tema, Vargas Llosa añade que considera importante que un escritor tenga esa clase de manías, es algo que cualquier persona normal tendría que arreglarlo con un psicoanálisis, no obstante a un escritor las manías le equilibran.
Más o menos es lo que cuenta en el reality de Tamara Falcó, llamado "La Marquesa".
No hay comentarios:
Publicar un comentario