Más que interesante el documental de Agnès Varda, Varda par Agnès, en el que relata su trayectoria cinematográfica, a la que ella llama escritura de cine, de una manera personal en la que incluye a su marido Jacques Demy, así como a conocidas personas del cine francés que han participado en sus películas.
Se trata de una conferencia bastante íntima en un teatro en el que se ven personas más bien jóvenes que me han recordado a la etapa en la que yo estudiaba Bellas Artes en Sarriko y junto con mis compañeros de clase acudíamos a todos los eventos que había en Bilbao relacionados con el arte y el cine, en salas más bien reducidas que llenábamos con nuestro entusiasmo..
Rodó este documental en el año 2019 con el propósito de dejar de hacer cine y dedicarse a las instalaciones artísticas, pero murió justo antes de haber dejado su magnífico legado cinematográfico en el que se respira poesía.
A pesar de pertenecer a la llamada nouvelle vague del cine francés, no fue fácil para ella ser aceptada como tal, debido a su feminismo radical y sobre todo por ser mujer.
Es una delicia presenciar con qué delicadeza enfoca cada película y cada escena, todo tiene un sentido muy personal lleno de intención, una sensibilidad a flor de piel.
Admiro y respeto a una mujer para quien las cosas no resultaron fáciles, no obstante ha conseguido un reconocimiento equiparable a los directores que eran totems en su momento a pesar de haber sido fiel a su propia ideología de que cine es un compromiso para compartir, para conocer al otro.
Un magnífico documental y una maravillosa mujer cuya obra no quedará en el olvido.
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