jueves, 4 de abril de 2024

SEIS MIL DIEZ Y NUEVE

 




Por circunstancias ajenas a mi voluntad, me encontré en un local de Deusto en donde cantaba Raphael.

Nunca le había prestado atención y jamás pensé que me pudiera gustar, no obstante, verle y oírle cantar fue una experiencia inolvidable, es un artista en toda regle, su entrega era total y absoluta, aprendí mucho con él.

Da gusto ver a verdaderos artistas, los cantantes jóvenes actuales, difícilmente me impresionan, no consigo concentrarme.



Hablando de otro tema, se ha puesto de moda servir la comida en el medio de una mesa tirándola de un cubo, sin platos ni bandejas, solo lo he visto en Instagram, ni siquiera he oído hablar de alguien que haya tenido esa experiencia, ni que se haya hecho en Bizkaia. No me importaría.









No hay comentarios:

Publicar un comentario