lunes, 11 de julio de 2022

CUATRO MIL SEISCIENTOS TREINTA Y CUATRO

 




He pensado mucho últimamente y he tomado la decisión de cambiar.

Todos los psiquiatras y las terapias de la nueva era concluyen diciendo que la única manera de mejorar está en el cambio.

Es obvio que yo he cambiado mucho, no obstante no es suficiente, porque considero imprescindible no llevarme malos ratos cuando los que están en mi entorno no se comportan como me gustaría, por lo que está claro que el problema está en mí.

Este fin de semana no he salido de casa y he llegado a la conclusión de que, insisto, soy yo la que tengo que cambiar y ser consciente de que es un asunto mío, tengo que controlarme y no dejarme llevar por la ira cuando algo me molesta o me enfada, porque la única que lo pasa mal soy yo y es ridículo pasar un mal rato por cosas que no tienen la menor importancia.

Se trata de preservar mi paz interior, ya que trabajo mucho en mantenerla y hago todo lo que puedo para conectar con ella a través de las técnicas que me reveló Prem Rawat.

Prem Rawat me enseña muchas cosas pero la fundamental y más importante es La Paz interior.

Todos la tenemos dentro de nosotros y él nos enseña a estar conectados con ella, por eso cuando me dejo llevar por un enfado tonto me molesta mucho, pierdo lo mejor de mí misma y luego me cuesta volver a ese maravilloso estado en que disfruto de la vida en su totalidad, prescindiendo de las circunstancias externas.

Ultimamente he tenido dos eventos a lo que no he asistido fisicamente pero los han transmitido y he podido verlos desde casa, uno en Berlin y otro en Barcelona con la mala suerte de que no me enteré de todo porque estaba tan a gusto escuchando a Prem que me adormecí, estoy deseando que los pongan en Timelesstoday.tv para escucharlos con los cinco sentidos y no perderme nada, porque cada vez que habla Prem Rawat aunque la conclusión definitiva es que "Todo lo que estás buscando está dentro de ti" la manera en que lo explica cambia y da ejemplos a través de los cuales aprendo muchísimo y es como si me diera un empujoncito en la espalda que me ayuda a ir hacia adelante, además de que me voy conociendo y me doy cuenta de que quiero ser mejor persona.





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