Cuando veo personas que se curan y se van contentas a su casa sabiendo que ya no tienen que volver al hospital, por lo menos de momento, me pongo contenta, me alegro por ellas y por mi, porque aumentan mi esperanza.
Tengo la oportunidad de conocer a gente con diferentes problemas, todos relacionados con la hematología y también tropiezo con gente que tiene recaídas y eso es más duro.
Prefiero no tener expectativas respecto a mi curación porque me consta que son la causa del sufrimiento pero reconozco que estoy contenta porque de momento todo va bien.
Sigo con mi rutina encontrándome cada día un poco mejor y más fuerte.
Unai Aranzadi ha recomendado una película de Netflix: "El ciudadano ilustre".
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